Actualmente, los jóvenes, durante sus actividades de integración en empresas, entrevistas de trabajo o en donde sea que les pregunten, usan el Propósito como guía fundamental para su selección de empleo.  Y hace tiempo que me pregunto:¿Será que es así mismo?

No es que dude de sus intenciones, al contrario. Cuestiono la búsqueda por la felicidad que veo en los jóvenes y en todos nosotros.  Una búsqueda exhaustiva, que en realidad es parte de los Movimientos Humanos – La Felicidad. Vivimos en un período social en donde la felicidad es el enfoque. Ella se ha convertido en algo tan natural que pensar que nacemos para ser felices parece lógico y digno. Y ustedes deben de pregutarse, ¿El propósito no es felicidad? Podemos decir que sí, pero no creo que sea este tipo de felicidad que la mayoría quiere o busca.

Lo que noto en mis investigaciones, es que el concepto de felicidad buscado por la mayoría está conectado al placer personal, en una visión más individual de la felicidad. Sé que caminamos para la Solidaridad, otro de los Movimientos Humanos que identificamos.  Sólo que apenas empezamos. Por ahora, se manifiesta como una búsqueda por empatía a partir del ejercicio de la tolerancia. Todavía no hemos llegado al concepto pleno del Movimiento Humano que escribí: la conciencia de nuestra conexión, que somos UNO. Eso es lo que entiendo por Solidaridad.

Por eso no veo una conexión entre Propósito y la búsqueda por la felicidad.  Aprendí que el Propósito, en su concepto esencial, tiene que ver con nuestra entrega para la humanidad, en un estado en que el Yo pierde importancia.  Para llegar a esta búsqueda, el Yo asociado al egoísmo y a la vanidad ya no existe. La búsqueda por la manifestación del Yo pasa a tener sentido a partir del beneficio del otro, del todo, del Uno.  

En este punto, la felicidad es sentida por la autoestima de saber que se está haciendo lo que se debe.  Por el orgullo de atender la ética interna independiente de la moral social conductora. Es una felicidad que tiene algo de plenitud, que, honestamente, veo poco en personas felices en su visión individualista.

Es importante aclarar que no considero un error usar el término Propósito para, quizás, lo que sería la búsqueda de Misión, de Causa, que precede nuestro caminar.  Si su uso nos llevará a un mayor autoconocimiento, ya hubo ganancia. Todo en esta dirección es camino.

La cuestión aquí colocada es el modus operandi de los jóvenes mediáticos y usuarios de redes sociales para construir su identidad. Muchas veces usan palabras de orden – como Propósito – para ganar más «me gusta» como si eso les indicara que van en el camino correcto.  Siguiendo con la búsqueda, a veces, insistente por aplausos que sus padres y parientes les acostumbraron a recibir a cada acto realizado. Cuando en realidad todavía se sienten como deberían por causa de la edad, asustados, en la búsqueda de saber quienes son.

Como he dicho a través del Movimiento Humano La Felicidad, la búsqueda por la felicidad es el camino que escogemos para saber quienes somos.  Descubrimos quienes somos a la medida que descubrimos que nos hace felices. Creo que es en este punto que los jóvenes – y todos que todavía no saben quienes son – se encuentran.  Buscando descubrir quienes son al entender que les hace felices y que les tiene sentido. Por eso pienso que Causa y Misión se encajan en esta etapa. El Propósito, en su significado esencial, me parece estar un paso adelante.  Pienso que nuestra entrega para la sociedad ocurre, legítimamente, cuando logramos saber con mayor propiedad quienes somos, y así, saber que somos capaces de entregar.